RESPUESTA A PREGUNTA EN FORMSPRING.ME/SANTIAGOSC
Seguramente en su origen hay algo de colonialismo pero actualmente tenemos la libertad y la posibilidad de oír muchísima música de cualquier parte del mundo, empezando por la local, y sin embargo seguimos oyendo mucha música en inglés.
A lo largo de la historia del hombre, las potencias dominantes siempre exportaron cultura. Por un lado, porque tenían la capacidad económica y militar para fomentarlo. Y por otra parte, porque los avances tecnológicos suelen originar también avances en la cultura y las artes.
Pero es importante aceptar que muchísima de la música en inglés que oímos la consumimos por su calidad formal, su expresividad y su originalidad. Está claro que hay mucha música en la que eso no sucede, sobre todo la orientada a públicos más infantiles y adolescentes. Pero en la que solemos oír, tarde o temprano lo artístico irrumpe o no. Y allí es cuando se produce el consumo o no.
En algún punto me dan pena los países angloparlantes porque por su centralidad cultural se pierden de oír tanta y tan buena música del resto del mundo. Y se pierden también algo que a muchos argentinos nos pasa al oír música en inglés. A no ser que seas bilingüe o que te molestes en averiguar las letras, en general los argentinos escuchamos un tema en inglés y entendemos sólo algunas partes. Todo el resto, lo puede llenar de significado cada oyente y esa es una experiencia artística superadora a la convencional. Escucho algo, me emociona su música, entiendo un par de frases y asumo de qué me está hablando y lo lleno del sentido que más necesite. Pura fantasía.