12.4.10

Desdoblamiento electoral



El gobernador de Chubut, Mario das Neves, anuncia que habrá desdoblamiento de elecciones en el 2011. Esto es, en Chubut un domingo se votarán autoridades provinciales y municipales, y otro domingo de otro mes se votarán autoridades nacionales. ¿Por qué sucede esto?

Como casi todo lo que sucede en la política, la coyuntura es la que impulsa modificaciones al sistema. Por lo general, más allá de discursos pretenciosos, los cambios que experimenta nuestro sistema político nacen por objetivos partidarios de cortísimo plazo: las elecciones y/o mandatos siguientes. Sucedió con la reforma constitucional en 1994 o con la reciente ley de partidos políticos, por citar dos ejemplos. Pero cuidado, esto no es necesariamente negativo; la motivación cortoplacista no invalida que puedan producirse avances en el sistema político.

Este desdoblamiento, al que se sumarían otras provincias, tiene como principal objetivo que los peronismos provinciales no terminen perdiendo sus elecciones enmarcados en una elección nacional de tono plebiscitario. O sea, que si la campaña nacional termina enmarcada en la lógica Kirchnerismo vs Antikirchnerismo, los gobernadores e intendentes no terminen siendo víctimas de una fórmula justicialista mal posicionada en la sociedad. Los gobernadores hoy están sometidos a los recursos nacionales pero cuanto más acerquen las elecciones, menos se expondrán a la derrota. Desdoblar es una buena forma de acompañar pero no tanto. Frase trillada pero clara, “los peronistas acompañan sólo hasta la puerta del cementerio”.

Lo que esconden estas estrategias es un dato que debería alarmar. Si el grueso del electorado se informase más, nada de estas especulaciones valdrían la pena. En el cuarto oscuro cada ciudadano elegiría a quién quiere votar para cada cargo y, de no ser del mismo partido, cortaría la boleta. Tan sencillo como eso. Pero la realidad suele alejarse de lo deseado y lo que sucede es que poca gente corta boleta; el electorado tiende a votar por un candidato que arrastra al resto. Entonces así como teníamos a gobernadores e intendentes que en el 2007 querían colgarse de la boleta de Cristina, ahora tenemos a un ex presidente con la esperanza de que gobernadores con alta aprobación en sus provincias estén presentes en su boleta.

Entendidas las motivaciones, ¿cuál podría ser el beneficio de esta onda de desdoblamiento? Fundamentalmente, que existan campañas diferentes implica instancias de debates públicos diferentes. Esto es, ciudadanos que participen y se informen, de manera diferenciada, sobre problemáticas nacionales, provinciales y hasta municipales. Sería un gran aporte. El problema potencial sería si esto no provocaría hartazgo y demasiada dispersión de energía en campaña y no tanto en gestión. Pero ese es otro tema; con un diseño institucional inteligente, reglas duras y justicia electoral independiente se mitigarían esos problemas. El caso brasilero es un buen ejemplo.