26.2.10
Para entender un poquito a Obama
Ayer Cristina opinó sobre la política de Barack Obama con la región. No está mal que tenga su opinión, lo que no parece muy acertado es que la haga pública y con un presidente que apenas lleva poco más de un año en el gobierno. Pero como todo desatino, terminó convertido en un boomerang. El funcionario estadounidense Arturo Valenzuela declaró muy sutilmente que no compartía lo dicho porque sabía que Obama era muy popular aún en Latinoamérica. O sea, dejando implícito que para criticar se debe tener una legitimidad de la que Cristina carece.
Sobre este tema, hubo una muy interesante entrevista anoche a José Octavio Bordón, ex candidato presidencial en 1995 y ex embajador en EEUU, entre otros cargos. Ante todo, minimizó las declaraciones de Cristina sobre Obama, indicando que si bien no eran ni oportunas ni constructivas tampoco eran tan graves.
Luego realizó una muy lúcida explicación describiendo la complejidad del sistema político norteamericano como causa de demoras o frenos a posibles iniciativas de Obama hacia Latinoamérica: multiplicidad de actores e intereses sociales y económicos, descentralización en la toma de decisiones, preeminencia del Poder Legislativo en cuestiones vitales, focos de conflictos más urgentes en el mundo.
Recordé un concepto que leí hace unos años para entender a Estados Unidos: uno imagina al presidente de Estados Unidos como una de las personas más poderosas del planeta, pero en realidad es un rehén de la opinión pública norteamericana. Un presidente puede ser electo por cuatro años, pero si no tiene apoyo de la opinión pública, no tiene iniciativa política y, por lo tanto, no tiene poder. La legitimidad se construye día a día, no sólo en los actos electorales. Cualquier semejanza con algún país de Latinoamérica es pura coincidencia…
A propósito, están dando por cable una simpática película protagonizada por Kevin Costner, “Swing vote”. Es una entretenida metáfora sobre el valor de cada voto y de la información como base del sistema democrático. Muy american pero bueno, entre los fuegos artificiales pueden encontrarse fuentes de inspiración y aprendizaje.